miércoles, 17 de octubre de 2012

MUERE NIÑA POR DESNUTRICION EN CHIHUAHUA
El fantasma del hambre en la Tarahumara resurgió otra vez al registrarse la muerte de una niña en el poblado de Pino Gordo, en el municipio serrano de Guadalupe y Calvo.
Las autoridades también atienden otros seis casos de esa misma comunidad, dos de ellos graves, por lo que se han redoblado esfuerzos para atender a las comunidades más aisladas y empobrecidas de la región.
El Sector Salud informó a través de su vocero Francisco Javier Valenzuela Casas, que los casos más graves ya se atienden en una clínica de la capital del estado y otros cinco en el Centro de Recuperación Nutricional de Guachochi.
"Lamentablemente ayer se registró el deceso de una niña de la comunidad de Pino Gordo, en Guadalupe y Calvo, que aunque fue trasladada para su atención inmediata, el grado de desnutrición que presentaba era muy severo y no resistió el tratamiento emergente", lamentó el vocero.
A principios de año se activó una alarma al correr la versión de que indígenas de la Tarahumara se suicidaban ante la desesperación que les provocaba el hambre, por lo que el Gobierno multiplicó a más de 80 brigadas móviles y habilitó ambulancias aéreas.
También se reforzaron los centros de recuperación nutricional y se llevaron despensas alimenticias a los 38 municipios indígenas, con una aparente mejora de la situación.
La comunidad de Pino Gordo ha padecido por décadas la invasión de sus predios y la falta de certeza en la posesión de la tierra ha enfrascado a sus habitantes en añejos litigios por la explotación de grandes extensiones de bosque.

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